7 Cualidades fundamentales en un Terapeuta dedicado a la Infancia

  1. Empatía

La capacidad de ponerse en el lugar del otro y comprender que puede estar sintiendo. Ser capaz de sentir que siente el otro, en relación a diversas vivencias que pueden estar ocurriendo en ese mismo momento o que al ser contadas nos dan la posibilidad de hacer un acercamiento a la emoción o emociones que se dieron en el momento que ocurrieron o en el momento que se están contando. Sin dejarse llevar por la emoción del otro.

Un terapeuta que trabaja con familias y niños, es importante que pueda ponerse en el lugar de cada uno de ellos para poder comprender como se sienten en cada momento y poder transmitir la información y actuar siendo respetuoso con sus emociones.

empatia terapeuta
Saber ponerse en el lugar de otro para comprenderlo y respetarlo
  1. Respetar los deseos y motivaciones de cada niño/a

Una de las claves para que el tratamiento sea eficaz, sea cual sea la disciplina desde la que se vaya a llevar a cabo (estimulación, logopedia, fisioterapia, terapia ocupacional, psicología, psicomotricidad…) es la motivación. Gracias a ella el niño/a es capaz de sacar el mayor rendimiento posible a la terapia, ya que, cuando algo nos motiva, nos lleva a utilizar lo mejor de nosotros mismos, nuestras capacidades y recursos se ponen a nuestro servicio para conseguir superar el reto. De esta manera el niño/a irá generando aprendizajes y desarrollando habilidades. Esto me lleva a otra de las cualidades fundamentales en un terapeuta, la paciencia.

terapeuta deseos y motivaciones del niño
Conocer a cada niño/a y sus motivaciones, pues todos son únicos y especiales
  1. Ser Paciente y desarrollar la escucha activa

Un terapeuta deberá ser paciente, el desarrollo de aprendizajes y habilidades lleva tiempo. Cada niño/a tiene su propio ritmo de desarrollo, crecimiento y aprendizaje. Aunque existan unos baremos aproximados de que es esperable que haga un niño/a según su edad, debemos observar la globalidad de su desarrollo, ofrecerles oportunidades de aprendizaje y vivencias siempre que podamos. Además de ofrecerles tiempo para su desarrollo y vivencias es importante que seamos realistas y no busquemos que nuestros pequeños hagan cosas que se encuentren lejos de lo que están preparados para afrontar, corremos el riesgo de desmotivarlos, frustrarlos y exigirles más de lo que pueden. De igual modo no debemos subestimarles haciendo repetidamente actividades que no suponen ningún reto ni desafío para ellos, caeríamos en una sobreprotección, y estaríamos limitando su desarrollo y aprendizaje. Debemos observar que capacidades tienen y desde ahí ir ofreciéndoles oportunidades de desarrollo con desafíos y retos que les requieran un esfuerzo asumible, que puedan conseguir si lo intentan y practican, debemos animarles y motivarles.

  1. Tener vocación

Disfrutar del trabajo con las familias y niños en el día a día. Dar lo mejor de uno/a mismo/a en cada momento. Vivir el trabajo con ilusión y energía positiva y ser capaz de transmitirla a los demás. Crecer personal y profesionalmente gracias a las personas que lo hacen posible (compañeros, familias y niños…).

terapeuta vocacion
Sentirse afortunado por poder dedicarse a lo que te gusta y apasiona
  1. Disponer de los conceptos necesarios para el desempeño de la profesión

Además de tener el titulo en la carrera universitaria correspondiente, es fundamental disponer de una base mínima de conocimientos desde los que partir en la práctica profesional. Para trabajar en la infancia es importante tener formación en Atención Temprana, donde se integran los conocimientos sobre el desarrollo madurativo del niño desde que es recién nacido hasta los seis años atendiendo a todas las áreas (perceptivo-cognitiva, motora, comunicativa y del lenguaje, social-emocional y autonomía).

  1. Curiosidad y deseo de saber más

Estar en continua formación ya sea por medio de máster, cursos, charlas, grupos de desarrollo personal y profesional. Lectura de libros, artículos, investigaciones… Desarrollo de propios proyectos e investigaciones, reuniones multidisciplinares, reuniones con profesionales de tu misma disciplina …Querer saber más, para poder tener un mayor conocimiento y recursos para poder aplicar y utilizar en la practica diaria.

terapeuta querer saber más, formacion continua
Disfrutar aprendiendo
  1. Incluir el juego en la terapia

El niño se forma y desarrolla a través del juego. Al igual que los deseos y las motivaciones de los niños/as deben estar presentes en las sesiones de tratamiento, el juego también tendrá un papel protagonista en la terapia.  A través de él, el niño/a irá madurando las distintas áreas del desarrollo favoreciendo su creciendo e interacción con el mundo que le rodea. Desde el juego el niño se relacionará con los diversos espacios (casa, colegio, parque, calle, centro de tratamiento…), con los objetos (material cotidiano, material escolar, columpios, elementos de la calle, juguetes y material de la sala de terapia…) y con los demás (figuras de referencia, familia, maestros, compañeros, terapeutas…).

incluir el juego terapeuta
Dar un mayor sentido a la terapia a través del juego

Estas son algunas de las muchas cualidades que un terapeuta debe tener y desarrollar para realizar un buen tratamiento y marcar la diferencia

Cristina Cancelas Ruiz

cristinacancelasruiz@hotmail.com

645 40 34 12

Fotografías obtenidas del banco de imágenes Pixabay

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